Por: Sughey Jiménez
Lleno de color, festividad, emociones y familiaridad así es el mes de mayo para el municipio de Tototlán, ya que para los tototlenses es el mes en el que se festejan sus fiestas patronales al Señor de la Salud.
Cada año varían la semana en el que inician pero siempre tiene que ser en ese mes y un miércoles, este año se dieron inicio el 02 de mayo y finalizaron el día 11, sólo durando nueve días.
Un tototlense sabe que se darán inicio a sus fiestas, cuando el primer día en punto de las 6 am comienzan a escucharse los cohetes y las personas que viven cerca de la parroquia de San Agustín, escuchan las campanadas y como la banda toca las mañanitas al señor de la Salud.
Así como también, en la tarde alrededor de las 5 pm para dar inicio a estas fiestas se realizan los gremios donde los dueños de los comercios del municipio participan, al igual que la plaza principal se va llenando a sus alrededores de juegos mecánicos, puestos de comida, dulces y sobre todo pequeños puestos de cantaritos de barro pintados con letras de colores Tototlán 2018, alrededor con botellas de tequila.
Nueve días en los que la plaza no se encuentra sola, grupos de amigos sin fin, una que otra banda tocando por ahí y miles de botellas de tequila para acompañar, estando desde 9 pm hasta 4 o 5 am acercándose la hora para llevar nuevamente las mañanitas al Señor de la Salud.
Uno de los días más esperados, es el día en que finalizan las fiestas patronales no para ya no desvelarse o dejar de tomar, sino que es el día más significativo y en el que la esperanza, la fe y el agradecimiento abundan por las calles de Tototlán.
Se realiza una misa que muchos dirán que es una misa cualquiera pero no lo es, a las 11 am se da inicio al agradecimiento al Señor de la Salud por unas fiestas
más y a las 12:30 pm el Señor de la Salud es bajado de su altar y colocado en una base en el centro de la parroquia para que tototlenses e hijos ausentes lo besen y bendigan sus artículos, ya que esto sólo sucede una vez al año.
Para ellos no importa el tiempo que tienen que esperar para llegar y dar las gracias, ya que antes de iniciar su recorrido, el Señor de la Salud se encuentra de 5 a 6 horas para toda aquella persona quiera llegar.
Empiezan a sonar las campanas una tras otra y los cohetes haciendo una armonía con ellas, era un aviso… El Señor de la Salud sería sacado de la parroquia para recorrer sus calles.
A un tototlense comienza acelerarse su corazón y llenarse de emoción, es tan grande su gratitud y fe que no les importa que tan fuerte este el sol y como cada año cuando se realiza esta peregrinación, comienza a llover pero eso no los detiene, son de cuatro a cinco cuadras llenas de personas vendadas y descalzas las que acompañan al Señor de la Salud, ya sea para agradecer o para pedir oración por su familia.
Adultos mayores, adolescentes y niños se pueden encontrar haciendo su recorrido con un entusiasmo porque saben que esto los identifica al lugar al que pertenecen y a lo que son, hijos ausentes no pierden sus costumbres ya que la mayoría que no alcanza a estar desde el inicio de las fiestas sólo vienen ese fin de semana en el que terminan para agradecer un año más.
Un lugar pequeño, un mes cualquiera para la mayoría y unas simples fiestas, para Tototlán es todo lo contrario, para ellos es como un niño en la espera de su regalo de navidad. Es el mes en el que agradeces lo bueno o lo malo, convives y conoces personas nuevas, mayo es el mes más esperado para los tototlenses.
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